Su nombre proviene del parentesco con las bellotas de pino, comúnmente conocidos como piñones. Sin embargo en muchos países también es denominada ananá, que en guaraní significa fruta exquisita, de la cual podrían identificarse más de mil especies.

La historia de la piña es muy consensuada, todas las versiones convergen en que proviene de América del Sur, específicamente Brasil. En un principio la piña causó gran impresión a quienes la conocían por primera vez, en época de conquista y colonización.

Su dulce sabor, su corona de hojas y la larga espera de su cosecha la convirtieron en la fruta preferida de la élite, al punto que quien tuviesen piña en su casa, poseían un símbolo de prosperidad; de ahí a que sea común verla de manera ornamental.


Si bien la piña es originaria de América del Sur, aparte de Brasil, sus principales productores son Tailandia, Filipinas e India. Sin embargo, la variedad de piña golden, que predomina en el mercado costarricense es la favorita del mundo entero.

La historia de la piña en Costa Rica

Se dice que Cristóbal Colón degustó la piña por primera vez en América, aunque no lo menciona en ninguno de sus escritos, lo describe el escritor Washington Irving: “Ahí encontraron por primera vez la deliciosa piña de Indias, o ananá cuyo gusto y fragancia le causó tanta admiración como regalo.”  Esto tiende a confirmar que la piña si es oriunda de América.

La historia de la piña en Costa Rica cuenta que en la década de 1970 se empezó a producir piña en el país de manera comercial, iniciando en Puntarenas y posteriormente expandiéndose hacia San Carlos y Grecia de Alajuela.

Desde ese entonces, Costa Rica encontró en Europa a su principal cliente. Este continente consume el 40% de las exportaciones a nivel mundial y Costa Rica es su principal proveedor en Centroamérica con un 92% de las exportaciones.

Actualmente según CANAPEP (Cámara Costarricense de Productores y Exportadores de Piña) en Costa Rica operan al menos 1,200 pequeños y medianos productores de piña, estos representan un porcentaje considerable de las exportaciones agrícolas del país y emplean a más de 23 mil personas de manera directa y a otros 92 mil de forma indirecta.

En Costa Rica existen alrededor de 42,000 hectáreas dedicadas a la siembra y cosecha de piña, una de las frutas preferidas del planeta entero.

Tanto éxito se debe al particular sabor que le aportan las tierras americanas a esta fruta, otro antiguo escritor español de nombre Gonzalo Fernández de Oviedo Valdéz, lo explica de esta forma:

“Hay en esta isla española (refiriéndose a América) unos cardos: que cada uno de ellos lleva una piña, la cual es una de las maravillosas frutas que nunca he visto en todo lo que en el mundo he andado, a lo menos en España, ni en Francia, ni en Inglaterra, Alemania, ni en Holanda (...) Ninguna fruta yo he conocido de estas, ni visto en todas las partes que he dicho y he estado, ni pienso que en el mundo haya estas cosas juntas que ahora diré. Y son hermosura de vista. Suavidad de olor. Gusto de excelente sabor.”

Estas afirmaciones terminan de afianzar la calidad de la piña que es producida en América, siendo Costa Rica uno de los principales productores, esencialmente de la piña Golden, una especie mucho más jugosa y dulce.

Esto es todo lo que se conoce de la historia de la piña en América, sin duda alguna ha logrado cautivar el paladar de muchos en el mundo. Hoy en día existen muchas formas de preparación de esta fruta y se le atribuyen incluso propiedades curativas.

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